jueves, 1 de marzo de 2012

Saqueador Profesional

¿Cómo es posible que actualmente seguimos viendo como héroes a los arqueólogos del pasado? ¿Cómo ha premios, coloquios, mesas redondas, con sus nombres? Sí, ellos hicieron trabajo pionero, ayudaron a definir cronologías, ¿pero dónde están los reportes de todas sus excavaciones? ¿Dónde están los resultados de sus proyectos? ¿Dónde está la ciencia?

Oh wow, mira qué bonita está esa pieza de cerámica...ohh dios, esa escultura de piedra enorme va a trae mucha gente a nuestro museo...ese cajete está perfecto para el estante. Todas esas formas de pensar estaban y están mal. Alfonso Medellín Zenil...el gran arqueólogo de Veracruz que se dedicó a llenar de monumentos el Museo de Antropología de Xalapa. No pues sí, las piezas de Laguna de los Cerros están bien chidas...pero nunca publicó los contextos ni la secuencia cerámica del sitio. La cabeza número 6 de San Lorenzo tampoco tiene un buen contexto porque la sacaron sólo para adornar el Museo Nacional de Antropología.

Y qué decir del trabajo de Stirling en La Venta...él también hizo trabajo pionero, pero a costa de qué? Drucker trabajó en el sitio también y, aunque sus reportes sean confusos, los publicó. Stirling excavó uno de los pocos entierros olmecas que se han encontrado y no sabemos si era un individuo o dos los que estaban enterrados. ¡Ya basta de saqueadores con título de profesional! ¡Hay que ser científicos responsables!

¿Cerro?

¿Cerrito? Ese, definitivamente no es un cerro...es una plataforma hecha "a mano" desde 1500 a.C, cuando comenzó el poblamiento en el sitio (Coe y Diehl 1980; Cyphers 2006). Es la primera obra de arquitectura monumental en Mesoamérica. ¿Pero por qué la hicieron? ¿Cuánto tiempo se tardaron en construirla?

Este tipo de preguntas es muy difícil de responder, pero los arqueólogos han hecho todo lo posible para poder responderlas. Más o menos en 1500 a.C. se comenzó a poblar la región de San Lorenzo y los antecesores de los olmecas (o los olmecas mismos, quién sabe...) y se comenzaron a construir plataformas bajas de tierra con el propósito de evitar las inundaciones, porque son muy frecuentes en esas tierras, además de que aprovecharon el nicho ecológico en el que vivían opara subsistir con los recursos del pantano, como pescado, camarón y animales como tortugas, jabalíes, venado, etc (Cyphers 2006).

La actual meseta o cerrito de San Lorenzo era antes una elevación natural muy muy pequeña y por las mismas fechas que mencioné anteriormente, que corresponden a la fase Ojochi (1500-1400 a.C.), se comenzó su ocupación y su construcción como una meseta artificial. Probablemente es en estos tiempos que un pequeño grupo de personas comienzan a tomar importancia para después formar parte de la élite olmeca. Tiempo después, durante la fase San Lorenzo (1200-900 a.C), que es cuando tiene su apogeo, el cerrito alcanza su extensión máxima, dividiéndose en diferenes secciones que indican el estatus social de sus habitantes (Cyphers 1995; 2006). La gente más poderosa vivía en la parte más alta, mientras que la gente de menor estatus habitaba las terrazas que se encontraban en las laderas del cerro.

Michael Coe cree que San Lorenzo representa la efigie de un ave, pero que no está terminada (Coe y Diehl 1980). A mí se me hace una idea muy rara, porque si tú observas bien el mapa del sitio pues la verdad no distingues ninguna forma concisa, a lo mejor alguna vez tuvo una forma, pero después de miles de años de erosión ya no es distinguible. Otros investigadores creen que es más factible que represente al cerro sagrado, un elemento muy común y antiguo en la ideología mesoamericana, que entonces tendría que medio comenzar antes de los olmecas para que ellos lo hubiesen plasmado (Cyphers y Di Castro 2009; Grove 2006). El cerro tiene muchos significados, puede ser el lugar de origen del humano, un lugar donde se une el infra, el supra y el mundo terrenal, en fin, es un lugar muy especial. Y más especial aún porque el cerro más cercano está a unos 10 km y las montañas más cercanas están a 60 km...los olmecas construyeron su propio cerro!

Bueno, ahora ya saben un poco más sobre la construcción y el significado de San Lorenzo en el pensamiento olmeca mesoamericano. Pero todavía no he dicho bien quiénes eran los olmecas...así que lo pondré en la siguiente entrada


Referencias
Coe, Michael y Richard Diehl
1980   In The Land of The Olmec. University of Texas Press, Austin.

Cyphers, Ann
1995  Descubriendo los misterios de la cultura olmeca. Universidad Nacional Autónoma de Mexico- Instituto de Investigaciones Antropológicas, México D.F.

2006 Surgimiento y decadencia de San Lorenzo, Veracruz: Del Ojochi al Nacaste. Arqueología Mexicana 15(87):

Cyphers, Ann y Anna Di Castro
2009   Early Olmec Architechture and Imagery. En The Art of Urbanism: How Mesoamerican Kingdoms Represented Themselves in Architecture and Imagery, editado por William Fash y Leonardo López Luján, pp. 21-51.

jueves, 23 de febrero de 2012

El Cerrito Enmedio del Pantano

Hace poco más de un año viajé con mi papá a Acayucan, Veracruz...es un lugar feo, sin chiste y donde hace muchísimo calor (o al menos esa es la impresió que tengo yo). Después de andar llendo y viniendo por algunos pueblos cercanos por el trabajo de mi papá, nos fuimos a visitar San Lorenzo. Al principio creímos que iba a estar relativamente fácil llegar, porque la cabecera municipal más cercana, Texistepec, era un lugar que mi papá había visitado antes y se suponía que no era tan difícil llegar.

Estabamos viéndola demasiado fácil...el sitio está más o menos a una hora y media de Acayucan, en carreteras que se están desbaratando, terracería y cero señalamientos. Estuvo emocionante ver los puentes destruidos por la inundación que había pasado unos meses antes y que seguían ahí, tirados en medio de la nada...es interesante ver cómo el clima cambia...empiezas a ver planicies pantanosas que en algún momento debieron de haber sido selva y que ahora la modernidad arrazó.

En fin, llegamos a Tenochtitlán, que es el pueblo más cercano, a unos 10 minutos en carro del sitio y visitamos el museo comunitario, que a pesar de ser sólamente del tamaño de 2 cuartos medianos, tiene unas piezas verdaderamente increíbles y hermosas. El calor y la humedad influyen en la percepción del lugar...estás todo sudado y apestoso pensando "¿Cómo aguantaban este maldito calor?".

Después de tomar una cantidad grosera de fotografías, el cuidador del museo nos dijo cómo llegar al sitio. Nos subimos al carro y empezamos a ir en línea recta hasta que topamos con una especie de cerrito que aparece de la nada...subes, subes y subes unos 50 metros, llegas a la cima y de repente...nada. No hay nada. Vacas, unos cuantos árboles, mucho pasto, unas lagunitas por aquí y por allá, pero no se ve nada de lo que cualquier persona esperaría ver cuando le dicen que van a ir a un sitio arqueológico (o sea big pirámides).

 "Ay, qué aburrido, mejor vámonos". Eso diría cualquiera, y no lo culpo, porque no saben qué fue lo que pasó ahí, en ese "cerro" de 50 metros de alto en medio de un lugar no montañoso. ¿Qué pasó ahí hace 3200 años? ¿Quiénes vivieron ahí? ¿Por qué no se ve nada? ¿Ese cerro de dónde salió?

¿De verdad es un cerro?

Bueno, lo dejaré para la próxima entrada...


En el Pantano

En medio del pantano yacen grandes rostros de piedra. Sepultados, devorados por la tierra, aguardan el momento en el que sean venerados de nuevo. Incomprendidos, nadie los entiende, todos pelean por ver quien tiene la razón absoluta, cuando en realidad la verdad se perdió hace miles de años; no hay memoria alguna que nos pueda ayudar a recuperar los hechos del pasado.

Algunos han tratado más que otros el responder quiénes eran esos rostros; otros simplemente se han dedicado a robar, a destruir, saqueando tesoros materiales, cuando el verdadero tesoro es el conocimiento y no algo que  pueda decorar la colección de alguna persona ricachona. También el que se hace llamar científico, holgazanes, ladrones profesionales con título de arqueólogos, que únicamente sacan cosas de las entrañas de la tierra para después abandonarlas en una bodega.

lunes, 20 de febrero de 2012

San Lorenzo


Desde que leí acerca de los olmecas en una revista de Arqueología Mexicana cuando estaba en la prepa.¿Cómo iba a imaginar que estas personas se habían expandido por medio territorio nacional y de Centroamérica hace 3400 años? Eso suena increíble, o al menos me suena muy muy interesante a mí. Además, con eso de que cuando estás en la primaria sólo te dicen que habitaron Veracruz y que eran la cultura madre, no se profundiza lo suficiente como para entender el impacto que tuvo en Mesoamérica. Además, en mi ciudad natal vivo a escasas dos cuadras del Museo de Antropología de Xalapa, el cual alberga una colección verdaderamente impresionante de escultura olmeca, teniendo en sus acervo 7 cabezas de 10 del sitio arqueológico de San Lorenzo y de 17 que produjo esta cultura.

Como es muy extenso el tema de la arqueología olmeca y las fuentes de información son básicamente inagotables, decidí enfocarme en el ya mencionado sitio de San Lorenzo.

¿Por qué San Lorenzo y no otro sitio? Porque, personalmente lo encuentro muy fascinante, hipnótico y misterioso. Este sitio se encuentra en el sur del actual estado de Veracruz, en una zona altamente inundable cercana a la actual población de Acayucan. Durante muchos años, pasó desapercibido para los ojos de los grandes exploradores extranjeros que recorrieron México en busca de tesoros y pirámides y fue hasta la década de los 30's que el mundo se enteró de su existencia gracias al arqueólogo Matthew Stirling (Stirling 1957). Lo que atrajo a Stirling del sitio fueron los rumores que escuchó sobre cabezas colosales, comenzando las exploraciones en 1946 buscando principalmente monumentos de piedra (Stirling 1957).

Tuvieron que pasar cerca de 20 años para que de nuevo las miradas de los arqueólogos regresaran al sitio, cuando a principios de los 60's Román Piña Chan y Alfonso Medellín Zenil localizaron más monumentos (entre ellos una cabeza colosal) y decidieron trasladarlos al Museo Nacional de Antropología y al Museo de Antropología de Xalapa (Coe y Diehl 1980). Esto desató un pleito local, ya que los habitantes de la comunidad no querían que se llevaran las piezas, lo que provocó que el ejército interviniera (Coe y Diehl 1980).

Como esto va para largo,(aparte no quiero excederme) creo que es el momento preciso como para cortarle  y dejar un documental que encontré y que la verdad está muy bueno, aparecen varios arqueólogos de renombre y tiene información bastante buena :)

Referencias

Stirling, Matthew
1957    Monumentos de piedra de Río Chiquito Veracruz, México. La Palabra y el Hombre 4: 9-28

Coe, Michael y Richard Diehl
1980     In the Land of the Olmec. University of Texas Press, Austin.





miércoles, 8 de febrero de 2012

¿Qué hacer?

Todavía no he podido decidir qué tema desarrollar para esta clase...me gustaría hacerlo de arqueología olmeca, pero creo que ya he llegado a un punto en el que me gusta tanto y he hecho tantos trabajos acerca de eso que ya no sé qué más decir. Aún así, hay mucho de qué sacarle en cierto modo, aunque encontrar algo innovador sea relativamente difícil, lo que en la actualidad está medio "sonando" son estudios químicos de proveniencia para detectar las fuentes de origen de algunos materiales. Lo malo es que aparentemente no está muy bien visto en la clase el usar artículos viejitos pero chiditos, porque la verdad hay artículos que aunque son de hace más de 30 años, siguen aportando valiosa información.
Para la arqueología olmeca, los estudios de proveniencia servirían para confirmar o saber de manera exacta de dónde obtenían sus artículos de lujo, como el jade o ciertos pigmentos rojos como el cinabrio (óxido de mercurio) o las vasijas de cerámica. Con esto se pueden entender mejor las rutas de comercio y las relaciones entre diferentes regiones de Mesoamérica. También podría elegir hablar un poco sobre género, lo cual es una de las nuevas tendencias en arqueología y que no se ha aplicado directamente a la arqueología olmeca.
 De verdad que no sé qué demonios elegir...

lunes, 30 de enero de 2012

El Lugar de la Huída

Cuando llegué a Cholula hace ya casi tres años, no sentí un gran sentimiento de pérdida de hogar ni extrañé tanto mi casa, ni a mi familia. A mis amigos un poco, y los sigo extrañando, porque hacía muchas tonterías con ellos. Creo que en realidad estaba como que huyendo de mi casa y de mi ciudad en cierto modo...en una ciudad pequeña como Xalapa donde conoces a medio mundo no hay mucho futuro, y menos si quieres estudiar arqueología en una facultad donde casi nunca hay clases y casi todo el tiempo los alumnos se la pasan drogados en los pasillos.
Por eso llegué a El Lugar de la Huída. No hay un nombre más atinado para una ciudad que está activa desde hace casi 2500 años para alguien que está escapando...y más si casi todas las personas que conociste durante tus primeras semanas en la escuela y que siguen siendo tus amigos están aquí más o menos por el mismo motivo. Claro que no todo es de mi agrado por estos lares...demasiado ruido, demasiada gente desagradable...
Pero tampoco todo es horrible; he conocido muy buenos amigos, mi novia, he ido a lugares que nunca pensé ir, me va muy bien (por primera vez en mi vida) en la escuela.
Todo cambió en Cholula.